Tratamientos
El tratamiento del cáncer de pulmón depende del estadio en el que se encuentra la enfermedad, del tipo de tumor y de las características propias de cada paciente.
Modalidades terapéuticas
Cirugía
Es la opción más curativa. Se utiliza en pacientes con un tumor local con afectación exclusiva del pulmón, sin afectación de los grandes vasos o algún otro órgano que pueda evitar la extirpación completa del cáncer.
La extirpación puede ser de una pequeña parte (segmentectomía), de un lóbulo (lobectomía) o de todo el pulmón afectado (neumectomía). Si hay que extirpar los ganglios situados entre los dos pulmones se realizará una linfadectomíamediastínica.
Tras la intervención el proceso de recuperación es molesto y largo. Puede perderse capacidad respiratoria. Suele ser necesaria rehabilitación respiratoria tras su realización. Los pacientes se recuperan tras varias semanas o meses.
Radioterapia
Es la utilización de rayos X de alta energía capaz de eliminar células cancerígenas o evitar que se dividan.
Se aplica sola o como complemento a la cirugía.
Puede administrarse como tratamiento rápido de los síntomas que produce el tumor.
La radioterapia externa se aplica desde el exterior, no precisa ingreso hospitalario ni resulta dolorosa. Cada sesión suele durar unos 10-15 minutos, en los que hay que mantener la posición, y se aplica entre 1 y 6 semanas, durante 5 días seguidos y descansando dos.
Los efectos secundarios de la radioterapia son:
– Sensación de cansancio mayor de lo habitual: Desaparece cuando se termina el tratamiento.
– Reacciones en la piel: Irritación en la zona de tratamiento ligeramente molesto. Es recomendable:
- No aplicar crema sin consultarlo antes
- No cubrir la zona con esparadrapo…
- Lavar la zona de tratamiento con agua o con jabón suave no irritante
- Secarse la zona con pequeños toques
- Evitar lesionar la piel tratada
- Utilizar ropa amplia y fabricada con fibras naturales
- No tomar el sol sin proteger la zona
– Dificultad para tragar o disfagia: La mucosa del esófago se inflama lo que puede dificultar el tragar alimentos sólidos especialmente. Por ello es aconsejable comer en pequeños bocados, no comer alimentos difíciles de tragar y tomar todo en forma de puré. Mejora rápidamente al terminar el tratamiento.
– Dificultad respiratoria: Aumenta o aparece la tos seca y una ligera dificultad para respirar.
En general es recomendable que:
– Comente con el oncólogo radioterapeuta que le trata cualquier nuevo síntoma que aparezca.
– Evite el consumo de tabaco y alcohol.
Quimioterapia
Es la utilización de fármacos muy potentes por vía intravenosa u oral para el tratamiento del cáncer. Su objetivo es frenar el crecimiento de las células tumorales, bien destruyéndolas o impidiendo su división y crecimiento.
Se utiliza con fines:
- Curativos: Cuando la intención de su aplicación es curar la enfermedad. Se emplea sola o asociada a otro tratamiento.
- Paliativa: Cuando se pretende controlar los síntomas producidos por el tumor, mejorando la calidad de vida del paciente y su supervivencia.
Antes de aplicar un tratamiento de quimioterapia hay que valorar que los niveles de glóbulos rojos y leucocitos sean normales y que los riñones funcionen correctamente.
Se administra en ciclos alternando con periodos de descanso. Suele precisar ingreso. Entre los ciclos se realizarán analíticas de orina y sangre para determinar lo anteriormente dicho.
Para no pinchar en cada ciclo, suele ponerse un catéter en una vena de grueso calibre que permanece, sin retirarse, hasta que finalice el tratamiento.
Los efectos secundarios más frecuentes son:
– Alteraciones digestivas
- Náuseas y vómitos. Para sobrellevarlos se recomienda:
- Comer despacio, masticando bien y en pequeñas cantidades (5-6 veces al día).
- Evitar olores desagradables y comidas ricas en grasas.
- Beber líquidos fríos a pequeños sorbos.
- Descansar al menos una hora después de las comidas.
- Evitar que la ropa apriete a la altura del estómago.
- No olvide tomas la medicación que le mande el médico.
- Diarrea: Hay que tener precaución con la deshidratación siendo recomendable:
- Realizar dieta absoluta en las primeras horas de la diarre.
- Tras dos o tres horas empezar la toma de líquidos a pequeños sorbos cada 5 o 10 minutos a lo lardo del día.
- Evitar la ingesta de lácteos y derivados.
- Tomar alimentos cocidos o a la plancha.
- Evitar bebidas irritantes.
- Alteraciones en la percepción del sabor de los alimentos: Las papilas gustativas de la lengua y del paladar se dañan por lo que se percibe una disminución del sabor de las comidas o un gusto metálico o amargo de las mismas.
- Para mejorar estos problemas se recomienda:
- Preparar comidas con buen aspecto y olor agradable usando especias o condimentos suaves en su elaboración.
- Realice enjuagues antes de comer.
- Utilice cubiertos de plástico si aparece el sabor metálico.
- Alteraciones en la mucosa de la boca: La mucosa de la boca se inflama acompañada de llagas o úlceras dolorosas que en ocasiones pueden sangrar. En estos casos es recomendable mantener una buena higiene bucal y dental.
- Usando cepillo y pasta de dientes suave.
- Cepillarse los dientes después de todas las comidas.
- No usar colutorios que contengan alcohol.
- Limpie el espacio entre los dientes con hilo dental.
- No fume ni tome bebidas irritantes.
- Utilice la dentadura postiza poco tiempo.
- El médico puede mandarle anestésicos locales y tratamiento específico para evitar la infección por hongos.
-Alteraciones de la médula ósea: La médula ósea se encarga de producir las células de la sangre como los glóbulos rojos, los blancos y las plaquetas.
- Descenso de los glóbulos rojos: Estas células se encargan de transportar el oxígeno desde los pulmones hasta el resto del organismo. Hablaremos de anemia cuando su cantidad es baja. Esta situación da lugar a cansancio, falta de aire ante pequeños esfuerzos, palpitaciones, mareos y palidez de la piel y de las mucosas. Para ayudar a sentirse mejor es recomendable:
- Descansar lo máximo posible
- No hacer esfuerzos
- Limitar su actividades
- Descenso de los glóbulos blancos o leucocitos: Estas son las células que se encargan de defendernos ante infecciones, si su número es bajo aumenta el riesgo de padecer infecciones. Si el descenso es importante los ciclos de quimioterapia se pueden retrasar. Para reducir el riesgo de infección es recomendable que:
- Consulte con su oncólogo y acuda al hospital lo antes posible si tiene más de 38oC de fiebre o aparecen hematomas espontáneamente.
- Evite el contacto con personas con algún tipo de infección (gripe, neumonía…)
- Antes de ponerse cualquier vacuna consulte con su oncólogo, algunas no son recomendables.
- Evite la vacuna con personas recién vacunadas.
- Evite las lesiones de la piel:
- No corte las cutículas.
- Utilice guantes cuando prepare la comida para protegerle de quemaduras y cortes.
- Si tiene alguna herida lávela con agua y jabón.
- Lávese frecuentemente las manos y los dientes.
- Descenso de las plaquetas:Estas son las células encargadas de taponar y evitar la hemorragia cuando se produce una herida. Si su número desciende puede aumentar el riesgo de hemorragia ante mínimos traumatismos. Para evitarlo se recomienda:
- Evite golpes, traumatismos o cortes.
- Extreme la precaución cuando maneje tijeras, cuchillos o cualquier otro utensilio cortante.
- Evite deportes de contacto o de riesgo.
- Acuda a su médico si aparecen puntos rojos en la piel, hematomas sin traumatismo previo, sangre en la orina, sangrado de encías…
-Caída de cabello: Lo más frecuente es que no sea completa o que el cabello se haga más fino. Cuando finalice el tratamiento el pelo crecerá de nuevo.
-Neurotoxicidad: Los síntomas más frecuentes que puede notar el paciente son sensación de hormigueo en manos y pies, visión borrosa y disminución de la audición. Estos también son efectos temporales que desaparecen al terminar el tratamiento.
Terapia dirigida
Se usan fármacos creados para bloquear o destruir las células cancerosas. Su efectividad dependerá de:
– Identificar la diana terapéutica, es decir, aquellas dianas del tumor que jueguen un importante papel en el desarrollo de mutaciones que lleven a una célula sana a convertirse en cancerígena.
- Del desarrollo de agentes que sean capaces de atacar a esas dianas concretas.
Este es un tratamiento en investigación que está dando lugar a resultados esperanzadores.